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El pasado lunes día 7 de Noviembre cumplió sus 90 años el
polifacético artista algecireño, Flores el Gaditano.
En los salones del Casino de Algeciras se celebró una fiesta
sorpresa para este cantaor y escritor incansable, acompañado por escritores,
cantaores y una legión de admiradores.
Abrió el acto el delegado de cultura del Casino, D. Luis
Silveira, y presidió la mesa Juana Mª Moreno, Emilio Ríos y Nurya Ruiz, los
cuales le preguntaron en un ameno coloquio, sobre los cantaores y bailaores que
él conoció y que ya están fallecido, a lo que él contestaba con una agilidad
mental impresionante.
Como se sentía tranquilo rodeado de grandes amigos, se
decidió a cantar algunos fandangos dedicados a su nieta fallecida, consiguiendo
poner al público en pie con una fuerte ovación.
La cantaora Loli Sanabria,
Carmen Navarro y Francisco García Carrasco (presidente de su peña
flamenca) pusieron el toque de música por fandangos, tarantas y malagueñas.
Juana Mª le recitó un poema dedicado a Algeciras escrito por
Flores y le cantó el cumpleaños feliz.
Su hija, Carmela, le regaló el compás de unos tanguillos
junto a un grupo de jóvenes cantaores y guitarristas, que ella prepara en sus
clases de la Bajadilla ,
Y por último, su sobrina y escritora Nurya Ruiz le regaló un
marco con su foto y un poema dedicado a él, el cual le hizo emocionarse y
comentó que ese cuadro iría destinado al museo, que en breve se abrirá en
Algeciras, sobre su persona.
HOMENAJE A FLORES EL
GADITANO
Si fuera un pájaro,
sería un ruiseñor.
Si fuera un libro,
sería El Quijote.
Si fuera una
estrella, sería el lucero del alba.
Si fuera una montaña
sería el Everest
y sin embargo
es un hombre sencillo
que le gusta pasear
por las calles de su Algeciras
sabiéndose querido
por su gente,
que le gusta contar
sus historias, a su manera,
y que las puertas de
su casa siempre están abiertas
para todo el que
quiera escucharlas,
es un hombre noble
en sus ideas
y sincero en sus
pensamientos,
es un grande del
flamenco,
de la poesía y de
las letras.
Autodidacta,
trabajador
insaciable,
que ante una hoja en
blanco
no hay años que
puedan
quitarle el deseo
de seguir dejando su
huella,
porque su mente es
lúcida como la de un pájaro,
extensa como la de
un libro,
clara como la mañana
y alta como una
montaña.
Sí señores, es él,
Florencio Ruiz Lara,
Flores el Gaditano,
al que le deben
pleitesía
el flamenco,
las letras y la
poesía.
por Nurya Ruiz Fernández
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