“Ya se dice que los locos abren caminos que más tarde seguirán los sabios.”
Hoy es el día mundial de la Salud Mental (fue el 10/10/14) y quiero dedicarle este artículo a todos mis amigos de la Asoc. Afemen (Asoc. de personas con enfermedad mental) de Algeciras y en especial a dos de ellos, a Antonio Lucena y Leonor Villaseñor, dos bellísimas personas con una gran sensibilidad y grandes escritores del Campo de Gibraltar.
A fines del siglo XIX, el antropólogo italiano Cesare Lombroso, padre de la criminología, planteó que el don artístico es una forma de desequilibrio mental y vinculó la creatividad con la esquizofrenia, por el alto índice de pacientes que plasmaban su tormentosa existencia en una obra artística.
Como afirma Faulkner en una de las entrevistas que concedió: “Un artista es una criatura impulsada por demonios.”
Los genios están un poco locos, o al menos, eso dicen. Lo cierto es que los estudios científicos confirman que existe una relación entre creatividad y enfermedades mentales, y aunque no es una regla infalible, los escritores son los que tienen un mayor riesgo de sufrir trastornos de ansiedad, bipolaridad, esquizofrenia, depresión y abuso de sustancias -alcohol y drogas-. Además, tiene el doble de probabilidades de suicidarse que personas que se dedican a otras profesiones
De los once premios Nobel de literatura estadounidenses, cuatro de ellos eran alcohólicos: Sinclair Lewis, Eugene O’Neill, William Faulkner y Ernest Hemingway. Además, Franz Kafka tenía depresión y ansiedad social, Leon Tolstoy era depresivo y con tendencias suicidas, Virginia Wolf, estaba diagnosticada de depresión, al igual que Winston Churchill.
El escritor Jorge Eduardo Benavides, dijo en una de sus entrevistas:
“Tengo claro que ser escritor es el único tipo de esquizofrenia vocacional.”
Y como dice nuestro escritor algecireño Antonio Lucena, en una entrevista que le realizó Pepe Salguero:
“Las personas tienen mucho miedo a lo desconocido“, así lo siente Antonio Lucena que a través de su primer libro de relatos, Del sueño y el ser, se adentra en el sentido de esta enfermedad mental, la esquizofrenia.
Uno de los escritores más reconocido y venerado, por muchos, en nuestro panorama nacional, se podría calificar como “nuestro loco oficial de las letras españolas”, fue Leopoldo Panero, fallecido recientemente y destacado poeta, seleccionado en 1970 como uno de los nueve novísimos por el crítico José María Castellet. Enfermo de esquizofrenia y voluntariamente recluido desde 1986 en el Psiquiátrico de Las Palmas de Gran Canaria, dedicó algunos de sus mejores versos a la locura, entre ellos los Poemas del manicomio de Mondragón y Esquizofrénicas.
Después de leer sobre la vida de todos ellos y por mi actividad cultural estar rodeada diariamente de tantos escritores, me quedan algunas dudas: ¿Es la escritura el bálsamo de la locura? o ¿Es la cordura el veneno del escritor?
Yo, por si acaso, prefiero compartir mis momentos con locos tan cuerdoscomo mis amigos de Afemen y agradecer desde estas lineas a sus monitores, por la gran labor cultural y artística que están desarrollando, con sus enfermos, en toda la comarca.
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